Muchas veces, las críticas de los demás nos afectan demasiado porque están de acuerdo con esa voz crítica interior. En algunos casos puede que las lleves oyendo toda la vida en boca de otros, hacia ti o hacia otros.
Las voces internas críticas o tóxicas son pensamientos automáticos negativos que pueden influir significativamente en nuestro bienestar emocional y mental.
Cuidar de todo aquello que acontece en nuestro interior es invertir en calidad de vida. Recordemos que los pensamientos negativos no se pueden eliminar de nuestra mente, lo que se puede hacer es reformularlos y bajar su volumen. ¿Qué tal si empezamos hoy a ponerlo en práctica?
Muchos de nosotros nos hemos vuelto expertos en evitar emociones desagradables. Esto se debe a que estamos distraídos de nuestras vidas ocupadas o simplemente no podemos hacer frente y manejar lo que podemos descubrir. El primer paso hacia la autocompasión es tomar conciencia de nuestro mundo inside: lo que nos provoca sentimientos de ira, asco o vergüenza; cómo reaccionamos instintivamente a estas emociones; el contenido (y el timbre emocional) de nuestro diáemblem interno y cualquier bloqueo o resistencia que encontremos.
El objetivo común de todas las técnicas aplicables será apartar el pensamiento obsesivo de la atención consciente y procurar que nos centremos en las vivencias del momento presente
El cuestionador: este crítico interno siempre cuestiona nuestras habilidades, lo que provoca sentimientos de inseguridad y baja autoestima.
Recuerda que este artículo tiene como objetivo brindarte información standard sobre cómo neutralizar pensamientos negativos, pero en ningún caso sustituye la ayuda de un profesional de la salud mental.
Al ser curioso en lugar de combativo, puedes comprender lo que tu crítico interno realmente intenta decir. 1. Reconocer su presencia
oneº El perfeccionista: Este crítico interno quiere que hagas las cosas a la perfección y sin problemas. Tiene estándares muy altos de desempeño, y cuando no los cumples, te ataca y te dice que sus acciones no son lo suficientemente buenas.
Comparación con los demás: La tendencia a compararnos con otros, exacerbada por las redes sociales y los ideales inalcanzables promovidos por los medios, puede conducir a sentimientos de insuficiencia y descontento con nuestras propias vidas.
En el momento en que comenzamos a pensar en cosas negativas, tratamos de expulsar inmediatamente estos pensamientos. No obstante, erradicar los malos pensamientos no es tan fileácil como parece, e incluso es una estrategia que puede ser contraproducente.
4º El moldeador: trata de lograr que te ajustes a una determinada forma de ser estándar establecida por la familia, comunidad o cultura, y los temores de mostrar tu verdadero yo te llevarán al rechazo y al abandono.
Puede vivir en constante expectativa de castigo y fijarse en los signos de amor y afecto perdidos click here en nuestras interacciones con los demás. Muy sensible a las señales de peligro y con un enfoque implacable en lo que podría salir mal, puede infundirnos ansiedad crónica.
Si elaboras una lista con estas cosas de las que puedes sentirte feliz y agradecido, tu estado emocional mejorará. Ten en cuenta que, en ocasiones, muchos aspectos positivos de nuestra vida pasan desapercibidos. Es tu responsabilidad volver a fijarte en ellos y valorarlos.